2.03.2016

NADA ES LO QUE PARECE

Así sin más. En el post anterior dejaba fluir mis sentimientos, esos que andaban escondidos buscando a la persona correcta para entregarlos, se ha terminado, para siempre, en fín, que así es la vida. A veces uno cree que tiene algo seguro o a la persona segura porque dice quererte y te lo demuestra, sin embargo, cuando va pasando algunos episodios que no te hacen sentir bien en un relación, te cuestionas si seguir o no con la persona o si va a durar lo que quieres que dure, eso pasaba por mi mente los últimos meses.

Puedo intuir que también pasaba por su mente, no estaba a gusto con algo, con algunas cosas tanto como yo, no lo dijimos, no lo hablamos, tal vez eso era lo peor, pero que podía decir yo, si sabía que si abría la boca iba a confundirlo más, ya había pasado con ciertas cosas que no estaba de acuerdo y que por seguir me las callaba, no me hacían sentir segura y por consiguiente, dejaba aflorar mis miedos e inseguridades, no mostraba mucho mis sentimientos, decía cosas hirientes y lo trataba algo mal. 

Sé que estuve mal, se que estoy mal, que no debo ser así, que debo confiar en la otra persona, pero estoy segura que no hubiera aflorado sin un pequeño incidente que me puso toda amarga y que creen que es? Pues sí, la ex, una ex de hace años revoloteando hasta en estos días, porque él siempre lo permitió y porque siempre lo va a permitir, es como si no hubiera cerrado ese capítulo de su vida y eso me hacía sentir insegura de él y de lo que sentía. Esa fue la llamita de todo este fin.

Todo se juntó y explotó, él tan radical, tan seguro de su decisión, tan frío al decirme que no me quería, que ya no me quería, que sólo existía cariño hacia mí, que lo dejáramos y que no iba a cambiar de opinión, que buscaba otra cosa, que no era psicólogo, que debería resolver mis inseguridades... egoísta, patán, maldito... lloré de impotencia, sin creérmelo, sin saber que estaba pasando en realidad, y yo ahí tratando de hacer lo posible para poder recuperar y solucionar esto, pero cuando dijo que no me quería todo eso terminó, no dije más, lo pasé. Me acompañó hasta la estación y cuando subí al bus, dió la marcha más rápida en su vida, no volteó ni un segundo y ahí me di cuenta que no me quería, como bien lo había dicho.

No pude dormir ese día y gracias a unos amigos pude distraerme ese mismo día del fin de la relación, aún así, no concilié el sueño y pensé y pensé y pensé... lo bueno y lo malo, y pues llegué a la conclusión que era lo malo lo que pesaba más, lo que no iba a estar de acuerdo o lo que tenía que sobrellevar, competir con un fantasma, si vieran las sonrisitas que se daba inconscientemente cuando lo miraba, recordando Dios sabe qué y el viaje que hicimos a Cusco, lo mismo, de antemano sabía que había viajado con ella en su momento al mismo lugar, qué más podía ser?

En fin, todo ya pasó, tal vez sea poco tiempo pero aunque no lo crean al tercer día me sentía bien, renovada, como si nunca hubiera pasado nada y como si todo hubiera sido un sueño, madurez? Una manera de afrontar la realidad? Aún no lo sé y desde entonces me siento bien y más que todo tranquila. Al parecer, él no era para mí, teníamos metas muy distintas a parte estaba la diferencia de edad y ni qué decir de ambos, las cosas malas de ambos que no supimos resolver, pero comprendí que si alguien te quiere de verdad estará ahí a tu lado para solucionar problemas y no huirá a la primera porque no es lo que buscaba, en fin, gracias me has hecho comprender muchas cosas y una de ellas es saber que no quiero en mi vida a un tipo como tú, así sabré escoger más adelante, gracias de igual manera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario